El Estudio Nacional de Drogas de Senda indicó que entre 2010 y 2014 el uso de marihuana pasó de 4,6% a 11,3%: en cuatro años el aumento fue de 145%. Hay además reveladores datos sobre alcohol, tabaco y cocaína.
Uno de cada diez chilenos consumió marihuana durante el último año. Según el XI Estudio Nacional de Drogas en Población General el uso de cannabis pasó de 7,1% en 2012 a 11,4% en 2014. Es la primera vez que el empleo de este estupefaciente alcanza los dos dígitos desde que el Servicio Nacional para la Prevención y Rehabilitación del Consumo de Drogas y Alcohol (Senda) realizó por primera vez este informe en 1994.
Mariano Montenegro, director del organismo, calificó este aumento como algo “inédito” en la historia del estudio. El informe señala además que 1 de cada 5 personas que usan esta sustancia tiene un “consumo problemático”. Estos datos son dados a conocer en momentos en que el debate sobre esta droga vive su punto más álgido, luego que la Cámara de Diputados se aprobara en general el proyecto que despenaliza el autocultivo de cannabis.
En 2010, 75.981 chilenos utilizaron por primera vez cannabis. Cuatro años después casi 250.000 personas tuvieron su primera experiencia con la marihuana. En otras palabras la cifra se triplicó. El director de Senda señaló que “en el 90% de estos casos son adolescentes y jóvenes”.
El estudio de Senda específica que si bien los jóvenes entre 19 y 25 años son los que más consumen (24%), hay un aumento significativo en los adolescentes –12 a 18 años- que pasaron de 6,7% en 2012 a 13,5% en 2014. Al analizar el uso de la marihuana por sector económico no hay diferencias significativas entre los estratos bajo, medio y alto.
Las experiencias con este alucinógeno aumentan, pero la percepción del riesgo que conlleva su uso disminuyó de 46,8% a 34,4%, mínimo histórico desde que se mide. José Luis Castillo, presidente de la Sociedad de Neurología Psiquiatría y Neurocirugía de Chile (Sonepsyn) explica que este fenómeno se debe a que “la juventud siente que el tema se ha banalizado y se plantea como una sustancia inocua”. Sobre este punto el director de Senda señaló que “la cannabis no es recreacional, no es lúdica, no es que no suceda nada con este uso”.
Montenegro dijo que desde la institución desean que exista una menor cantidad de consumidores por lo que la iniciativa parlamentaria de legalizar el autocultivo va “claramente en el sentido contrario. Lo que queremos es que haya menos acceso”.
El informe de Senda incluye también análisis acerca de otras sustancias. Se ve, por ejemplo que la tendencia a la disminución en el consumo de alcohol que se había manifestado desde 2006 se detuvo e incluso retrocedió: los chilenos que beben alcohol mensualmente aumentaron en comparación a 2012. De este porcentaje 2 de cada 5 personas declararon haber tenido un episodio de embriaguez durante los últimos 30 días. Mariano Montenegro explicó que el consumo problemático es tres veces mayor en los sectores bajos que en los altos y señaló que es necesario “redoblar los esfuerzos para estabilizar y bajar el consumo”. El estudio también muestra que la cantidad de fumadores aumentó de 21,9% en 2012 a 22,7% en 2014. Este es el primer incremento desde que se empezó a medir la prevalencia en 2002.
En lo que respecta al consumo de cocaína el 1,4% de los chilenos afirmó utilizarla. Esto es 0,5% más que lo registrado en 2012. Pese a que el sector bajo es el que más utiliza esta droga (2,1%) el que más aumentó fue el medio. En Chile, de las 137 mil personas que utilizan esta sustancia, el 35% de ellos es adicto.
Lea los detalles en el documento adjunto.
Fuente:
Escrito por Bastián Garcés