En octubre la Universidad San Sebastián cumple 35 años. El hito según el rector Hugo Lavados, es importante, pero sobre todo porque refleja -que en un período corto para los tiempos académicos y universitarios- el gran desarrollo y la consolidación que ha alcanzado la USS desde que abrió sus puertas en Concepción.
La Universidad es la segunda mayor del país en términos de matrícula de pre y postgrado, está en el top 10 de las instituciones chilenas en publicaciones de investigación científica según el Nature Index Research 2024, y lidera en proyectos con Vinculación con el Medio. Con estos antecedentes se prepara para enfrentar un nuevo proceso de acreditación institucional.
-Este año se cumplen 35 años de la USS. Considerando su experiencia previa como rector, ¿qué desarrollo ha tenido la institución durante estos años?
Llevo un año en esta segunda etapa como rector. Y por supuesto que considerando el período que he estado vinculado a la USS, primero como decano de la Facultad de Economía y Negocios (en ese entonces) hasta hoy es una institución bien diferente. Las universidades tienen un ciclo de producción y trabajo que es muy largo, que tiene que ver con la duración de las carreras, por eso es muy destacable cómo se ha incorporado que hay que hacer las cosas con un nivel de excelencia, pero acortando los plazos. En ese sentido, los avances que hay en materia de investigación, los enfoques de transformación y la incorporación de tecnología es bien destacable.
También hemos tenido que estar permanentemente ajustándonos en contextos que han cambiado como el inicio de la gratuidad, los cambios en el proceso de acreditación y el funcionamiento de la superintendencia de Educación Superior y la subsecretaria del área. En todas las supervisiones basadas en las regulaciones que se han definido la institución ha aprobado de manera impecable.
-¿Cómo se ha logrado equilibrar esos desarrollos considerando la expansión que ha vivido la USS en estos 35 años, donde creció tanto en Santiago como regiones?
Nuestro crecimiento ha ido de la mano con la maduración y consolidación de la institución que se ha convertido en una Universidad con mayor complejidad. En la práctica, la USS ha logrado conjugar desarrollo con este nuevo escenario. Nosotros hemos crecido en términos de matrícula en todas las sedes, expansión que ha ido acompañada de una inversión en infraestructura muy importante. También incorporamos investigación que genera conocimiento pero que además tributa a la formación de pre y postgrado, proyectos de VCM, aseguramiento de la calidad, todo de manera ecualizada en las sedes de Concepción, Patagonia, Valdivia y Santiago.
-En la medida que la USS se complejizó e incorporó nuevas instituciones como la Fundación Ciencia Vida, el Centro de Estudios Científicos (Cecs) y el Club Deportivo USS, además de diversos centros focalizados en investigaciones y docencia en distintas temáticas. ¿Cuál es el punto común de esas instituciones con la USS?
Esas instituciones trabajan dentro de la USS y están directamente relacionadas con la estrategia de profundizar la investigación, por lo tanto, en la creación de conocimiento y cómo eso tributa también a la formación de pre y postgrado. Además, en la USS se han creado centros en distintas áreas del conocimiento los que junto a los ya señalados han permitido, por ejemplo, crear 10 programas de doctorado.
Estos centros también se vinculan con algunos de los énfasis de la USS como es la incorporación de la formación transversal y el desarrollo de programa alineados con los valores de la USS como son la historia, la filosofía y las humanidades. El Club Deportivo USS se relaciona con que la actividad física es muy importante en el bienestar y en la mantención de una vida saludable. Somos una universidad que ya tiene 35 años y aspiramos también ser un aporte a la comunidad de manera integral.
-Uno de los objetivos de la USS es acceder a la acreditación institucional de excelencia, ¿cuáles son los principales focos en los que se deberá trabajar para lograrla?
La acreditación institucional tiene que ser resultado del crecimiento y mayor complejidad que ha alcanzado la USS. No tiene sentido mirar la acreditación como un fin en sí mismo, no obstante que ella tiene una gran importancia, pero debe ser una ratificación de lo que la USS está haciendo.
En Chile, los niveles de acreditación no están sólo relacionados con el posicionamiento de la universidad, sino que tiene que ver con los aranceles y concursos de investigación, en las posibilidades de vinculación internacional entre otros. Por ello, el aseguramiento de la calidad debe ser un desafío permanente que se refleje en todas las actividades de la universidad.
-¿Qué desafíos enfrenta la USS, previendo los cambios institucionales que se podrían introducir a la educación superior y la necesidad de procesos de calidad permanentes?
La calidad académica, el aseguramiento de la calidad y la gestión interna lo tenemos. Terminaremos 2024 con 350 doctores e investigadores, con proyectos de vinculación con el medio, profesores y programas de pre y post grado. Por lo tanto, contamos con académicos, directivos y colaboradores y con los recursos financieros para continuar desarrollándonos.
Las dudas podrían venir desde el área financiera por los cambios propuestos al marco que opera para las universidades. La USS requiere y deben continuar invirtiendo en infraestructura, en proyectos de mejoramiento de la docencia, programas de investigación y otros que representan montos significativos, por ello uno de los riesgos es que el escenario se modifique.
-La comunidad Sebastiana lamentó la pérdida de don Luis Cordero como presidente de la junta directiva, ¿qué aspectos de su trayectoria y mirada es necesario seguir impulsando en la USS?
La partida de una persona decisiva en el proceso de crecimiento y desarrollo que ha tenido la USS es irremplazable. Lo importante es que se mantendrán las definiciones fundamentales de la institución y desde ese punto de vista, la importancia y significación de Luis Cordero se plasma en el conjunto de valores y principios que guían nuestra acción, cuyos fundamentos están basados en el humanismo cristiano y en poner al estudiante al centro de todo nuestro quehacer. La mejor manera en que podemos recordar a Luis Cordero es siguiendo esos valores y llegando al nivel de excelencia.
-¿Dónde quiere llegar la USS en los próximos 10 años?
Queremos mantenernos en un lugar muy alto dentro del escenario universitario chileno, con resultados de nuestro proceso formativo de pre y postgrado del más alto nivel, muy orientado al perfil de nuestros estudiantes y las necesidades del país. Como lo señalé antes, fortalecer las otras funciones misionales de una universidad como es la formación de profesionales, la creación del conocimiento y los programas de desarrollo en nuestro entorno.
Precisamente, una de las grandes dificultades es que no sabemos en qué medio vamos a vivir en 10 años más, porque depende de qué pasa con las nuevas tecnologías, la IA y las tendencias como el cambio demográfico y climático. Pero sin lugar a duda que queremos ser una de las UES más destacadas del país y continuar siendo reconocidos por nuestro aporte en formación, investigación y vinculación con el medio y siempre con un enfoque regional.