Proyecto USS abre espacios de inclusión para mujeres migrantes

Iniciativa de Vinculación con el Medio Promoviendo la inclusión de comunidades migrantes, trabaja con personas que atienden las fundaciones Madre Josefa y Educere, a través de actividades educativas y asistenciales desarrolladas por equipos de Enfermería, Nutrición y Dietética, Odontología y Derecho Vespertino.

La Región Metropolitana concentra la mayor proporción de personas migrantes en el país, lo que ha abierto una serie de brechas, en aspectos como la salud, la educación, la protección social y la inserción laboral, especialmente en el género femenino, lo que supone integrar a mujeres en programas de capacitación.

En esa línea, las fundaciones Educere y Madre Josefa ofrecen asesoría legal, social y laboral, a través de sus centros de atención al migrante, junto a la implementación de casas de acogida, a fin de contribuir a la inclusión social de sus beneficiarios, acompañando a personas y familias en el establecimiento de un proyecto de vida.

Para apoyar esta labor, la Universidad San Sebastián, a través del Proyecto Colaborativo de Vinculación con el Medio (VcM) Promoviendo la inclusión de comunidades migrantes, liderado por la carrera de Enfermería, busca contribuir a la inclusión de familias extranjeras pertenecientes a estas organizaciones, a través de actividades educativas y asistenciales desarrolladas por estudiantes, con supervisión docente, en el que también intervienen equipos de Nutrición y Dietética, Odontología y Derecho Vespertino, en espacios educativos no tradicionales.

La propuesta contempla la realización de dos capacitaciones dirigidas a mujeres: Cuidado de personas con dependencia moderada a severa y Cuidados del niño y niña. Ambas actividades incluyen un diagnóstico participativo –actualmente en desarrollo– realizado por internos de Enfermería y Nutrición y Dietética, para establecer necesidades específicas de capacitación y línea de base de los educandos, y durante el segundo semestre se efectuarán las actividades educativas conjuntas, a partir de lo observado en terreno, donde los estudiantes establecen un vínculo directo con la población beneficiaria.

Paralelamente se efectuarán actividades de promoción de salud oral y tratamiento de problemas odontológicos, a cargo de equipos de Odontología, en un box habilitado en la Fundación Educere, con enfoque de riesgo en niños y niñas; así como también se implementarán instancias de asistencia legal, realizadas por estudiantes de Derecho Vespertino, abordando temáticas relacionadas a la regularización migratoria y Ley laboral.

A partir de este trabajo, además, se espera realizar un proyecto de investigación para determinar el estrés por aculturación de madres migrantes pertenecientes a ambas fundaciones

La académica de Enfermería USS, Angélica Aguirre, supervisora de los equipos estudiantiles, manifiesta que “este proyecto ayuda a nuestros estudiantes a reafirmar los conocimientos que tienen, aclarar dudas y desarrollar mayor seguridad de lo que están haciendo. Los profesionales de la Enfermería cumplen un rol importante respecto a formar y entregar herramientas de autocuidado y cuidados a otros, que es lo que se hace en este caso”.

Para la estudiante de Enfermería, Romina Donoso, “este proyecto es una instancia bonita en la que podemos compartir nuestro conocimiento y tratamos de hacerlo de la mejor forma posible. Todo esto nos ayuda a seguir repasando contenidos que de aquí en adelante vamos a ver permanentemente”.

Espacios de inclusión

Este proyecto tributa al Programa Territorial Hito Más Niñez y Adolescencia Saludable, en la línea de acción de innovación para el autocuidado. La académica de VcM de la Escuela de Enfermería, Vanessa Jara, líder de la propuesta, señala que “mediante la ejecución de estas actividades los estudiantes desarrollan competencias disciplinares específicas. El trabajar con personas migrantes que presentan altos niveles de vulnerabilidad, les permite comprender cómo las determinantes sociales influyen en el estado de salud y su calidad de vida. Así, se complementa el rigor profesional con el compromiso social, aumentando las posibilidades de empleabilidad, al contar con la experiencia de trabajo directo con este perfil de usuario, que hoy en día se encuentra presente en múltiples ámbitos”.

Al respecto, Cathalina Pereira, trabajadora social de la Fundación Madre Josefa, agradece el interés de formar a mujeres migrantes, sin que su situación migratoria sea un impedimento. “Brindarles este espacio seguro significa un impacto tremendo en su vida, porque no solo aprenden sobre un tema específico, sino que también generan vínculos y redes entre ellas. Muchas trabajan su autonomía de atreverse a salir solas para dedicar unas horas a la semana para ellas mismas y ven un impacto relevante en sus vidas. Por otra parte, muchas vienen con estudios superiores pero, por su situación migratoria, se han visto minimizadas y/o desvalorizadas en sus espacios de trabajo, por lo cual participar en estos cursos ha servido para compartir sus conocimientos y revalorar sus saberes”.

En tanto, Marco Paulsen, coordinador del Área Migrante de Fundación Educere, señala que “la perspectiva que propone la USS, centrada en el respeto de los derechos, en la participación de las personas y en la generación de procesos de autonomía, es pertinente para el trabajo con personas que requieren de reconocimiento social y esto fortalece las posibilidades de inclusión en la sociedad de acogida. A la luz de la actual experiencia y la del año pasado, creemos que estas colaboraciones son de efectiva utilidad para los participantes”.

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