Con la presencia de diversos actores del sector productivo del archipiélago, la Universidad San Sebastián (USS) sede De la Patagonia realizó en Castro el primer Consejo Consultivo Territorial fuera de Puerto Montt, con el objetivo de escuchar las necesidades que tiene la isla con miras a los 200 años de la anexión de Chiloé a la República y generar proyectos que ayuden al desarrollo del territorio.
Este Consejo es un instrumento de Vinculación con el Medio que se constituye como un espacio de información, diálogo y reflexión respecto a materias relativas a la gestión y desarrollo de la vinculación con el medio en el territorio, cuyo objetivo principal es promover el crecimiento económico sostenible y equitativo para la región. Para ello, sugiere problemáticas y desafíos de relevancia regional sobre los cuales la Universidad pueda hacer frente a través de la docencia, la investigación y la vinculación con el medio, generando iniciativas, proyectos y/o programas; así como también propone la generación de redes, acuerdos y convenios con sectores productivos, entidades públicas y organizaciones de la sociedad civil que aporten al progreso de los territorios.
En la ocasión, y a través de mesas de trabajo, académicos de la Casa de Estudios escucharon a los representantes del mundo agrícola, pesquero, salud, turismo y cultura, entre otros, quienes entregaron su visión de cómo está Chiloé y de cuáles creen son las necesidades que tiene la provincia.
El vicerrector de Vinculación con el Medio de la Casa de Estudios, Antonio Pujol, aseguró estar “muy contento de haber realizado nuestro Consejo Consultivo en terreno y no encerrados en nuestra Universidad, lo que refleja nuestro compromiso con el progreso de las regiones. Acercarnos a los territorios y reunirnos con sus actores, nos permite conocer las problemáticas de primera mano, con mayor nitidez, lo que nos abre muchas oportunidades de trabajo conjunto para aportar en la búsqueda de soluciones”
Por su parte, el vicerrector de la sede De la Patagonia, Sergio Hermosilla, precisó estar “muy satisfecho con lo que hemos visto, con el trabajo que se ha desarrollado, con las propuestas que nos han planteado desde el punto de vista de los desafíos que tenemos como Universidad de poder aportar, apoyar y poder trabajar con la comunidad en Chiloé, que tiene una riqueza especial, desde el punto de vista cultural, del patrimonio arquitectónico. Vamos a trabajar de manera colaborativa en la búsqueda de mejores condiciones para la población”.
Cecilia Guineo, agricultora de Ancud con sello Sipam (Sistemas Importantes del Patrimonio Agrícola Mundial), manifestó que este tipo de encuentros es de suma importancia, “porque hay muchas cosas que necesitan y en otras que se pueden llegar a acuerdo y hacer cosas en conjunto. Si bien Chiloé es territorio Sipam desde 2012, no existen políticas públicas del mismo Estado para apoyar el Sipam, no hay una línea de fomento o de apoyo a esto y eso falta”.
También fue parte de este Consejo Consultivo Territorial, Felipe Montiel, director del Museo Municipal de Castro, quien aseguró que a Chiloé le falta inversión, generar recursos para proyectos de cuidado del patrimonio para las futuras generaciones. “Me parecen relevantes instancias como esta. Es significativo que la Universidad, un centro de estudios importantísimo en este país, tenga la capacidad de escuchar a las comunidades locales y sobre todo venir a un territorio como Chiloé, lleno de carencias, y reflexionar en torno a lo que ha pasado con los isleños en estos 200 años. Eso permite generar discusión sobre esa vinculación que debe existir entre este tipo de instituciones y las comunidades”.
Damián Valdés, encargado de Comunidad y Extensión del Parque Tantauco, calificó la instancia como “muy positiva, un diálogo necesario, donde pudimos plantear ideas, preocupaciones y generar espacios de confianza para pensar cómo se nos viene Chiloé a 5, 10, 15 años más, con una mirada y aporte académico que es lo que propone la Universidad”.
Valdés enfatizó que la misión principal de Tantauco es la conservación de una zona importante de bosque nativo y turberas, por lo tanto, “nuestro desafío a futuro es que eso pueda mantenerse, pero con más esfuerzos en investigación, educación ambiental y actividades que nos vinculen con la ciudadanía para que entendamos que es muy relevante conservar nuestro ecosistema para que el patrimonio cultural y natural que hace a Chiloé tan único se conserve en el tiempo”.